Más de lo mismo. Sí. Pero esta vez en plan de verdad (“rancio† incluso, como me dijo una vez alguien). Para todos los que nos engatusaron los cuervos hace ya más de 10 tacos, y luego nos defraudaron (hay que recordar “By your side† y “Lions†?; aunque hasta incluso esos discos me gustaron), el repunte que supuso “Warpaint† (2008) nos colocó en una agradable incertidumbre: la del “ahora qué†. Pues bien, ahora más y mejor. Se nota que, tras la reunificación de la hermandad Robinson, han chupado carretera y escenarios, y aquí está el resultado, con sorpresa: a la venta ha salido un CD (“Before de frost…† —reminiscencias dylanianas para quien las quiera ver— presentación austera como su puta madre) y en su interior hay una tarjetita con un código para descargarte el otro disco en la página web del grupo, “…Until de freeze†. Grabados en estudio… con público. Una delicia. Para disfrutar dejándote llevar lánguidamente con una cerveza en la mano…
Hace poco (algunos lo recordarán) disfrutamos de una gran celebración en tierras sardas donde a alguien se le ocurrió pinchar “Hard to handle† a toda pastilla (bueno, en realidad muchos no se enteraron), el otro día atronó el aleatorio del iPod con “Sometimes salvation† y ésta misma tarde un amigo me comentó que lo último de los Crowes estaba muy bien; un par de pasadas por los discos no han hecho más que corroborarlo…
…más de lo mismo, sí, pero es cojonudo.
Thanks a lot, Bird.
Felicidades J.
Sin temor a equivocarme, al menos demasiado, podría decir, y bien alto, que todo lo comentado hasta ahora en estos 3 (4?) años de vida brutista bajo la denominación de “disco recomendado† ha sido una mera preparación, un introito dubitativo, un vano intento de mamporrero musical para llegar “aquí† y encontrarnos con éste grupo. Ha sido el inicio de muchas cosas, demasiadas, tanto en el ámbito musical (ahí procuraré no meterme), como en el personal, desde aquél ya lejano día de reyes de 1994 cuando me encontré perplejo -y algo cabreado- con un ejemplar de “In the wake of Poseidon† (1970), regalo de mi tío (cuando los tíos aún regalaban cosas; creo que fue el último año). Curiosamente es uno de los discos menos conocidos del grupo, y no precisamente el mejor, pero fue el inicio; el resto vino sólo, como un canto rodado…
Pues esto (aparte de muchas cosas que no se pueden ni deben contar…) es lo que me traigo de la despedida (de soltero) de uno que aparece por aquí como la lluvia, muy de vez en cuando pero siempre acertado en sus opiniones y bienvenido. Y se nos casa. Ahora, a estas alturas. La moda.
Ayer, al desempolvar recuerdos latentes, tras unas horas de charla, en el tugurio de color y ruido suavones, con unas cuantas Heineken delante en la barra (tienes razón J, no es una buena cerveza, pero es que la ponen tan fría…) una cosa llevó a la otra, y de pronto sonó «Wiser time», nos retrotrajimos 9 años, al verano del 99, a aquél viaje, e indefectiblemente a este disco. Recuerdo perfectamente que fue entonces cuando lo escuché por primera vez, del tirón, y hubo que rebobinar la cinta entera para volverlo a escuchar (en la otra jodida cara creo que habitaba el insufrible Kravitz).
Uno de estos momentos es el que transcurre en los surcos de este disco. El tiempo se detiene para regalarte un instante de absoluta paz emocional. Pocos discos tienen esa cualidad, cada cual tiene el/los suyos. Éste me llegó de refilón, de mano de uno de mis pocos amigos, como (casi todas) las grandes cosas de la vida, para provocarme una hecatombe de quietud tensa, de calma boba, sobra decir que con un gesto en la cara de absoluta imbecilidad. Es de esos discos que, una vez terminados, tienes que volver a escuchar para cerciorarte que no ha sido una ilusión fruto del cansancio, el hastío o el calor. Ya no vale decir aquello de disco-concepto, esos calificativos (lamentablemente absurdos) de perogrullo, realmente torpes. Esto es un discazo, y punto. Una amalgama en perfecto equilibrio de varios estilos. Partiendo de una base de música americana «básica» (joder, se trata de un ex-