Una de mis postreras debilidades… acrecentadas inevitablemente éste verano con la visualización de la película «En la cuerda floja»; sencillamente fue un estímulo importante, casi definitivo, que hizo que deambulara por las calles arrasadas por el sol tarareando alguna de éstas canciones inolvidables.
Parafraseando cierta canción, «la escena era concreta…», situémonos en el momento: un Johnny Cash a la vuelta de casi todo, prácticamente agotado, sin rumbo, adicto al cóctel estimulantes/tranquilizantes; decide repentinamente (realmente sería la cantidad de correspondencia que le llegaba de allí? sería una fijación? un anhelo?) dar un concierto en la prisión de Folsom y grabarlo y sacarlo como disco, con el correspondiente recelo de la casa Columbia, teniendo en cuenta las corrientes musicales de la época, a saber: ése año vieron la luz discos como «el blanco» de los Beatles, Electric Ladyland de Hendrix (ufff), Beggar’s banquet de los Stones, el Village Green de los Kinks (jeje) así como joyas escondidas de la talla de «The family that play together» de Spirit (uno de los mejores discos de la historia…) o el Mr. Fantasy de Traffic; también salieron grandes discos en directo, como el Super Session (Bloomfield-Kooper-Stills) o el Live at the Apollo de Mr. Brown (aaaaaamen). Y en ése preciso momento llega el amigo Cash para menear la música country por el forro, pasada por la trituradora, y rodeado de presos.
El repertorio de canciones, en fin, abrumador, aunque creo que es lo de menos, gracias a la interacción que logra con ése público tan particular. Pero desde la inicial Folsom Prison Blues, pasando por la estremecedora Dark as the Dungeon y la irresistible I Still Miss Someone (un minuto y medio en el que se dice casi todo…) para arrasar con la alocada Cocaine Blues la genial 25 minutes to go. Y así uno tras otro, los temas se suceden entre comentarios de Cash con los presidiarios: sobre la vida, el amor y la ley, sobre el sentido de hacer las cosas de una determinada manera, dejando a otros la decisión de juzgar lo que está bien o mal.
Precisamente es éste concierto el punto de partida de la película-revisión de la vida y obra de Johnny Cash, En la cuerda floja, muy acertada en sus retratos (un Joaquin Phoenix realmente deslumbrante…)
Poco después de éste directo, vendría su continuación, quizás para desmontar aquéllo de «segundas partes nunca fueron buenas…» (pues sí), en la histórica prisión de «San Quintín», un concierto posiblemente más redondo y pulido, pero menos crudo y desesperado…en fin, que opinen los oyentes.
No soy un seguidor del country, de hecho puedo decir que nunca me ha gustado, salvo Gram Parsons, pero éstos directos tienen su sitio en mi iPod, y suenan a menudo…
mi baja temporal por subir a ciertos tejados, me ha permitido rescuchar a este verdadero man in black, siempre atento a las causas perdidas y aún por salvar. Un corredor de fondo por la línea delgada del anochecer. hoy todos reconocen su influencia. se enrtregó hasta el final y falleció hace unos años enfermo de una modalidad de parkinson llamado sd. de shy-drager. un ejemplo de lealtad a uno mismo. y como recuerda Rob en alta fidelidad (S. Frears): «Mi libro favorito sigue siendo Johnny Cash, biografía de Johnny Cash, por Johnny Cash», un clásico. Gracias como siempre, mr. taliban.
JOHNNY cASH AT SAN QUENTIN.
El disco está bien provisto con temas clásicos de cash, entre ellos «i still miss someone» y dos exitos de la sun records «big river» y el «walk the line».Lo mismo que hizo en at folsom prison, cash cuida equilibrar el programa, con numeros para electrizar al auditorio y otros que son piezas inspiradas. Su composicion «san quentin» provoca los vitores por su vision descarada del lugar del crimen(«San quintin, ojalá te pudras y ardas en el infierno») ; en cambio, la cancion religiosa «There’ll be» peace in the valley, interpretada por carl perkins y el grupo the carter family, levantan respetuosos aplausos.
este album le valió a cash un premio grammy por la mejor interpretacion vocal masculina Country, Johnny Cash nos dejó en el 2003. saludos entrañables a la gente pervertida.
Buceando en mi corrompida memoria, rescato para tí mr. Taliban de la pradera, un título que sin duda te será muy util para futuras consultas jazzisticas. «Discoteca ideal del jazz» publicada por la emputecida editorial planeta. El autor de dicho vademecum musical se hacia llamar moller Riambau.
Así mismo el numero 6 de la revista «la factoria del ritmo» tiene un suculento cuadernillo central, con información socorrida. Si necesitais de alguna que otra consultilla bibliográfica…..no lo dudeis ni un instante….disparad a matar.
saludos entrañables
Agradecido JF: por tu reciente «incorporación» al brutismo, por lo de gente pervertida, por tu corrompida memoria, por tus consejos que sin duda serán de gran interés, ayuda y dedicación…espero que sigas por aquí (aguantando lo que te echen, ya que te ofreces…)
solo tengo una pega , el libro de altafidelidad es una gilopollez , y aver si le echan huevos y hacen un biopic de hank williams y nos dejamos de pijadas
yu nou
el disco de san quentino es bueno, pero en america nadie ha leido a socrates, claro(lo digo por el comentario moral, etc)
vota IU
?
Esto de las modas…
hello,I`m bossjan… divino tesoro que ha sido este tipo, apodado el hombre de negro (narran que asi vestia siempre ¿?, a mi me encantaria?, Leo con satisfacción a Talibán del Rock con un artículo de mi género preferido, el country-rock. del que JC ha sido sin duda el pionero o precursor de un estilo inconfundible, asociado a esa voz profunda, como debe ser en un buen rockero, hace que en mi biblioteca musical tenga un lugar destacado. Gracias Talibán por hacer que desempolve estas viejas joyas, que sin duda sonaran en los rincones de mi casa durante estas fiestas llenas de cascabeles, musgo, figuritas y sones lánguidos de paz. Aprovecho para mandarte un saludo para este nuevo año a ti personalmente y por ende a todos los que estais en este circulo bruto, conocidos y desconocidos para mi…
(subo el volumen de mi equipo piooner hasta límites casi concertísticos…)
HELOO, I´M JOHNNY CASH…