Lo reconozco, es algo personal… dejando éste punto claro, lo demás es historia, y música, y canciones irrepetibles. Segundo, es un disco en directo; y creo que, para hablar de THE BAND, quintaesencia de los grupos de carretera (antes de sacar su primer LP llevaban más de 6 años tocando, robando comida en supermercados y durmiendo en su furgoneta), hay que hacerlo de ésta manera (al igual que los ABB).
El quinteto canadiense formado en Ontario (sin olvidar al tejano Levon Helm, increíble batería & vocalista) , apadrinados por Ronnie Hawkins, estaba formado por Jaime Robbie Robertson (guitarra & vocalista), Rick Danko (bajo & vocalista), Richard Manuel (piano, órgano & vocalista) y el gran Garth Hudson (multiinstrumentista de vientos y teclados- éste era el «callado»). No es broma, en éste grupo varios eran los vocalistas principales, cada uno con su estilo… Helm profundo, Danko sentido, Manuel borrachín melancólico
sobre su piano, Robertson con sus notas de guitarra camuflada, al servicio del conjunto.
Para llegar al disco que hoy tenemos en las manos hay que pasar irremediablemente por sus 3 primeros LP: MUSIC FROM BIG PINK (68), THE BAND (69) y STAGE FRIGHT (70); todos ellos redondos, muy aconsejados, cargados de irrepetibles canciones; cómo olvidarse de «Caledonia mission», «The weight», «Chest fever», «This wheel’s on fire», «Across the great divide», «The night they drove Old Dixie Down», «Up on Cripple Creek», «King Harvest», «The shape I’m in», «Stage fright» o «The rumor», amalgama de sonidos y letras
sacados desde lo más profundo del ser humano. Precisamente por éso comento hoy un directo, es imposible dejar fuera alguna de las canciones nombradas (y las que quedan…). Y más recomendable aún es la edición remasterizada, con 45′ adicionales (10 canciones, 4 de ellas con Mr. Robert Zimmerman, quien quiera entender que entienda). Y, tras el largo viaje, llegaría «The last Waltz», cerrojazo impresionante (éso es una retirada y lo demás son pollas: la caja de 4 CD y la película de Scorsese lo refrendan) a una carrera completa, inolvidable.
Lo dije, era algo personal, pero LA BANDA es LA BANDA.