Shutterfly

Amazon sigue renovandose y si hace pocos dí­as presentaba su nuevo servicio de mapas, ahora se ha asociado con Shutterfly, sitio para editar y compartir fotos on-line. Lo más interesante para mi es la oferta de revelado e impresión de fotografí­as que te permite ‘plantar’ una imagen practicamente en cualquier sitio, desde tarjetas y libros, hasta en tazas, camisetas, alfombrillas para el ratón, bolsos, etc. Los Snapbook™ esos me han gustado. [CNET News.com]

K2 Beta Uno

Está avanzando el nuevo proyecto de Michael Heilemann, creador de la archiconocida plantilla Kubrick para WordPress: K2. Ya ha publicado la primera beta de lo que los autores llaman una modificación de WordPress, porque supera el concepto de ‘tema’ o ‘plantilla’. Cuando esté finalizada la probaremos.

The Doors | L.A. Woman (1971)

The DoorsLa verdad, podrí­a haber sido otro: los dos primeros son cojonudos (suprimo los tí­tulos por obvios, esenciales) y el previo a éste me tuvo colgado más de un año (rhythm & blues sucio por parte de unos californianos!); pero, ya sabéis, los trabajos paridos en la plenitud (y más allá dirí­a yo), una vez que se ha llegado a lo más alto (y a lo más profundo de las miserias humanas), sólo algunos sacan el (in) genio para regalarnos obras de arte sacadas de lo más hondo, de donde no se sabe si se volverá a poner la mente, salvo cubierto de malvas… y aquí­ tenemos un ejemplo de todo esto.

LA WomanGrabado insólitamente por tierras europeas (necesidad de huir, entre otras cosas de la ley, de sí­ mismo…), entre juergas interminables por las calles de Parí­s, disociado de sí­ mismo, Jim Morrison (o lo que quedaba de aquel sex symbol) colgado del micrófono, barbudo, barrigón, nos acojona con su voz gutural llevándonos por un variopinto conjunto de canciones que hacen de este disco algo inolvidable: desde el inicio («The changeling») apreciamos que ha habido una vuelta de tuerca desde el Morrison Hotel, más bluesy y sucio (otros ejemplos más puristas los tenemos en «Been down so long» y «Crawling King Snake»by John Lee Hooker), aunque aún hay tiempo para la melodí­a agradable («Love her madly» emociona; en «Hyacinth house» nos susurra que necesita un amigo: ¿alguien le escuchó?) y la relajación musical en «Cars hiss by my window» donde aparece un solo de guitarra en el que al final descubrimos con pavor que se trata de gemidos del amigo Jim«The Wasp» es una sintoní­a muy propia para la radio (Texas Radio and The Big Beat sin ir más lejos). «L’America» es una canción cojonuda y olvidada en las recopilaciones, una joyita.

Jim MorrisonPero el disco no serí­a el mismo (ni los Doors si me apuran) sin dos joyas como «L.A. woman» y «Riders on the storm», las habré escuchado miles de veces y continúan emocionando como el primer dí­a, sobre todo «Los Jinetes en la Tormenta», bello apocalipsis anunciando el final (curiosamente «The end» fue el principio de la leyenda, con la ayuda coppoliana de unos inmensos Sheen y Brando, sin olvidarnos del pequeño-gran Hooper, el mayor hijoputa de la historia del Hollywood moderno), pues Morrison la palmó antes de ver la luz el disco (fracaso multiorgánico por excesos; devastación fí­sica con desenlace incierto).

La leyenda se consagró en aquella habitación…

Enlaces relacionados »

    [The Doors | Official Website]
    [The Doors | allmusic.com]
    [Jim Morrison, modoso y formal estudiante universitario | El ví­deo | El artí­culo ]