Me llamo Ismael. Soy maestro de escuela e intento sostenerme en el caótico derrumbe de proyectos y desastradas aventuras que es mi vida. Me convertí en un inadaptado y decidí alistarme en un barco ballenero, el Pequod, junto con un arponero pagano y sodomita llamado Queequeg. Nuestro barco está comandado por un hombre paralítico, amargado y vengativo. El Capitán Ahab no sólo es un ser humano abrasado por el odio, sino la personificación misma de esta pasión.
Nuestra singular singladura nos arrastra directamente hacia la catástrofe, demoníacamente, sin tener apenas tiempo de reflexionar sobre la temeridad del intento. En esta aventura, hay una presencia real de la muerte, y cuando digo real me refiero a que no se trata de los fantasmas que invocamos con la imaginación. No. Aquí la percibimos con la plenitud de nuestras conciencias. Está aquí mismo al alcance de nuestras manos, irrecusable.
Al final… yo, solo yo consigo escapar de la muerte. Ismael que en hebreo significa… escucha a Dios.
Escucha, los zopencos no deben dar premisas por sentadas. ¿Cuánto tardará en estar lista la pierna?
Tal vez una hora, señor.
Acabadla y traédmela. ¡Ah, vida! Aquí estoy, orgulloso como un dios griego, y sin embargo quedo deudor de este burro por un hueso sobre el que apoyarme.
Maldito sea este endeudamiento mortal y mutuo que no acabará con los libros de contabilidad.
Llegué a está novela por casualidad, tras terminar de releer una obra de Hugo Pratt llamada “La Balada del mar salado† la primera aventura de Corto Maltés. Tras quedar maravillado nuevamente por el cómic, vagué por los estantes de la librería en busca de Conrad, London, O´Brien… pero al final me topé con Melville y su ballena blanca.
En Moby Dick se pueden encontrar desde razonamientos metafísicos de muy difícil comprensión a una narración de tintes épicos, pasando por un manual naturalista sobre la fauna marina.
Merece la pena.
Imagen original en Wikimedia Commons.
Recuerdo un grabado que vi hace tiempo, el capitán en la proa desafiaba con un arpón el lomo blanco de Mobby Dick (buen tema de os zeppelin)… había espuma de mar y de los días y se veía en sus ojos la furia de todos los abismos… Viva el arpón Gin (qué ginebra, dios).
Particularmente prefiero las aventuras de Corto Maltés, su fábula en Venecia me parece un poema visual. La novela me parece una obra magnífica, eso si, cuidado con las traducciones que andan por ahí), algunas te pueden hacer la lectura un suplicio, y como veo que te gusta el comic, te recomiendo a mi entender una saga que no tiene nada que envidiar al -Corto-, se llama Isaac el Pirata de un autor francés llamado Christophe Blain, publicada por editorial norma. Una gozada.
P.D. Al parecer los traductores de la obra de Melville, no se ponen de acuerdo con la primera hoja de la obra.
saludos
Mensab vuelve con un buen post. El retorno de los hijos pródigos.
«¡Hacia ti bogo, ballena omnidestructora, pero invencible! ¡Al fin lucho contigo! ¡Desde el corazón del infierno te hiero! ¡Por odio te escupo mi último aliento!»
Y yo, por mi parte, reivindico, ya puestos, la no tan conocida «narrativa corta» de Melville, cuyo ejemplo paradigmático (e inolvidable) es y seguirá siendo «Bartleby el escribiente». En cuanto a todo lo demás, preferiría no hacerlo…
curiosamente Lolafromhell, Mensab me regaló el primer volumen de Isaac el pirata no hace demasiado.Y ahora suspiro esperando el 6º… jeje
Y sobre el libro, que es impresionante. Y la peli también! 😉
«Aquí estoy, orgulloso como un dios griego, y sin embargo quedo deudor de este burro por un hueso sobre el que apoyarme»
Asín se escribe cojones! y así se reconoce un clásico.
Amigo Mensab, creo que eres de los pocos en los que resultó efectiva la antigua campaña aquella de «donde hoy hay un cómic, mañana habrá un libro», hahahahahahahaha!
Gran reseña. Abrazos!
Gracias, gracias a todos de verdad. Esta novela, es de esas cosas que no te esperas, quiero decir; lleva pululando por los estantes de mi casa años y años, y no fue hasta hace unos días que me entró una curiosidad malsana por el libro, aunque para ser precisos, (y aqui te doy la razón Talibán) esta obra tiene uno de los mejores comienzos de la literatura.(y eso invita a continuar).
Amigo youmeik, mi pasión por el tebeo se remonta aproximadamente a las primeras guerras púnicas y comenzó a la par que mi interés por la literatura, aunque bien es cierto que en mi casa estos últimos ocupan un lugar secundario en mis estantes, de hecho suelo deshacerme con relativa facilidad de ejemplares que solo hacen acumular polvo.
El personaje de Ismael, tiene ciertas similitudes con el de Isaac, aunque cierto es que este último es un pelín más gamberro. Muza el sexto para Diciembre.
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jeje Mensab. por cierto [OFF-TOPIC] he estado ojeando el comic del autor de Isaac el pirata, GUS. Tiene buena pinta. Y también he estado ojeando la nueva edición de EL INCAL… no me gusta el nuevo color (esas sombras), lo prefiero en colores planos como suele ser MOEBIUS de siempre.
Y por cierto, la editorial TASCHEN celebra su 25 aniversario y está que lo tira, corred a vuestra libreria de cabecera. Hoy me he pillado un libraco gran formato de H.R. GIGER por 10â¬!!! Y han sacado una versión light del famoso mastodonte sobre el fotógrafo DAVID LACHAPELLE (aquel de 1000â¬) por 50⬅. onde está el truco? jiji
y continuando con el off-topic… Mensab, algún dia tendré que hablar de Slaine Mac Roth, 1er rey de Irlanda. A Madame B casi la tengo convencida para que le de una oportunidad 😉
Slaine, primer rey de Irlanda… es increíble descubrir que en siglo VII antes de cristo ya existían los anabolizantes.
tu mira Conan como se puso na más que de empujar la noria.
No me imagino a madame en comunión con la obra de Simon Bisley….tu verás!
Lo de Bededick *Tashen* berlag, tiene su explicación, a saber: imprimen en singapur, o al menos las ediciones de 25 aniversario se hicieron allí, con lo cual los costes (por mucho barco que tengas que fletar) sale económico, de ahí luego surge una dificultad, la redistribución *llega mal y tarde*. Hay ocasiones que tras la venta de algún título de su fondo, es prácticamente imposible reponerlo, al menos a corto-medio plazo.
Si te gusta el dibujo de Bisley, te recomiendo su *Biblia* cohonua, aunque tiene muchísima obra dispersa (juezz dred, Doc savage, el mulo, y el salvaje lobo…..)
saludos