¿Syd, qué?

Cuanto más profundo caigo, más dulcemente bebo†
“La luz fluyente de la divinidad†, Mechthild von Maldeburg, S. XIII

Ciudadano BarretParece ser que el cuerpo de Syd Barret dejó de funcionar el pasado 7 de julio. Pensaron hace tiempo los universitarios que no era bueno para el negocio. Lo echaron de Pink Floyd. Hasta Jimi Henrdrix se indignó, to ciego… Pesaron que Pink Floyd debí­a controlar su energí­a. Umma-gumma-gumma-umma, yu nou, me llevo dos, esto es un negocio, cariño. Aun así­, me gustan los pinfloyes “en todas sus épocas† (hasta el jota sentencia). “Ya lo tengo: meteremos 2 coristas y un saxofonista†; “ok syd…† (roger-the wall, 1968)

Cuando pensábamos en Syd, pensábamos en arquetipos, de “peligro†, de “locura†, de extinción de lo que nos ata. Yo creo que se convirtió en un ciudadano, ya que volvió de pisar en la zona abisal y parece ser que no le gustó negocio. No estaba loco: eso seguro. Sin embargo: tuvo esa valentí­a, y por tanto, despreció el utilitarismo. Como suele ocurrir, se quedó solo. Rodeado de arena. Al volver del satori, pensó que mejor era quedarse en casa viendo el béisbol y tomando papas fritas.

Es más mitológico pensar que cuando los periodistas llamaban a su puerta, él contestaba: †¿syd qué?†; es más farmacocrático pensar que progresó a la psicomimésis gracias al ácido. De nuevo, cágome en el estado terapéutico en alianza con esos verduleros que son los periodistas. Gustavo el Reportero. ¿Y qué? Cuando se crea un lenguaje melódico e iluminado en “the madcap laughs†. Sonreí­a el monje Simeon: sonreí­a en su locura. Un superdotado sentido melódico. Roger Waters sólo hace blues y sinfonismo, claro… nadie es perfecto.

Sin embargo, la máquina del dinero Floyd no consiguió turbar su descanso eremí­tico de ciudadano de Cambridge. Las cualidades éticas intachables de los “locos†; qué curioso, aquí­ parece que el único que no vende su culo es el locotonto. Mal vamos.

A parte de su música, de esa Visión musical que torna el music-hall sajón en un deslabazamiento humorí­stico de la melodí­a (goooooooool!), tan Syd, a parte de eso, digo, nos mandó siempre un mensaje: que vale la pena pisar la sima abisal pero conviene llevar el hilo de Ariadna con un imperdible en tu culo. Si no, terminas comiendo gusanitos en el W.C. mientras te cortas las uñas y lees el Discoplay. A la vez.

    Que no haya sufrido en ese tránsito.
    Que su familia le haya abrazado.
    Que el Espigia haya limpiado las heridas.
    Que descanse.
    En Paz.

será de este modo: yo inspiraré mi aliento, y tu alma seguirá hasta mi, como la aguja al imán†
_matilde, siglo eterno.

8 Comments

  1. Pero mira que era tonto el Syd… menudo «pinfloyh», aeh? Mira que pasar de industrias, macroconciertos, discos de oro, presentaciones, giras, hoteles, dineros a espuertas, tí­as buenas, comilonas de la hostia (con sus buenas lonchas de postre), y encerrarse a intentar sacar lo mejor de sí­ mismo, sin condición, pero con extensión, tocar en solitario para poquitas personas, dejar (seguramente) en algún cajón de su cuarto, al lado de los calcetines sucios que su madre andaba buscando para echar a la lavadora, escrita en un trozo de papel, olvidada, alguna de las mejores canciones de la historia de la música, y encima dejar que otras canciones las exploten los demás… Jajajaja, pinfloyh, que eres (eras) un pinfloyh, hombre, a quién se le ocurre…

  2. Me sumo, obviamente, a éste homenaje y rindo pleitesí­a a éste trovador lunático fundador de ése movimiento pinfloi-aeh tan añorado.
    Sus canciones de pasajes oní­ricos siempre me han cautivado
    Aunque bueno, siempre preferiré a los Floyd post-Barret (y éste debate darí­a de sí­………….) y tengo mis razones
    Ahí­ lo dejo, mole

  3. La última gran revolaina de Syd Barrett: morirse en San Fermí­n.
    Gracias por tus palabras, cosmogonic. Escucho The madcap laughs con lagrimones en los ojos y con la sonrisa cómplice del que sabe que este cabrón al final hizo lo que le dió la gana.

    «Cantaba el amigo y decí­a: ¡Oh, qué gran malandanza es amor! ¡Ah, qué gran bienandanza es amar a mi Amado, que ama a sus amadores con infinito amor eterno, cabal en toda su perfección!»

    Ramon Llull, Llibre de amic i amat

  4. Syd era un hombre loco, pero todos los genios han sido algo locos, su música era el reflejo de su locura, entonces su locura era maravillosa.

  5. […] Se subastan los bienes de Syd Barrett. No se cómo le sentará esto a cosmo…. [MetaFilter] En bruto tal dí­a como hoy »[Ví­deos Online | 2006][Guí­a de regalos | 2006][iPhone | 2004] […]

  6. ***si fue bueno l ode sid..tengo todos los discos de pink floyd, antes y despues de sid…no creo que haya sido tan malo que haya salido de pink floyd..si les gusta esta grandicima banda rindan trubuto…no hablen pestes de ellos…acaso ud an hecho algo por la musica que puedan criticar….yo si lo hago , soy estudiante de este hermoso arte locura creacion….y uds que????????***

Comments are closed.